Ulasan Hotel Mae

El restaurant Mae, está ubicado frente al mar y tiene una infraestructura preciosa. El salón del estar y para almorzar es maravilloso. Pero todo lo anterior se cae con la comida. Mala preparación en mariscos. El chupe de jaiba es aguado y cargado al orégano, las machas a la parmesana duras y amargas. Y el la relación costo calidad de la comida ofertada deja mucho que desear y deben mejorar su estándar de servicio. Hoy no contaba con carta disponible y tuvimos que revisarla directamente desde el teléfono de la jefa de salón. Se supone que la oferta gastronómica de Maitencillo es el marisco, pero acá le hacen un flaco favor a un sector al cual se vista para disfrutar de una buena comida. Nos fuimos tristes.

El hotel tiene algunas pequeñas deficiencias, pero la amabilidad del personal es tan grande que hace que la estancia allí sea excelente El restaurant es muy bueno y también muy bien atendido. La cordialidad es la tónica. El spa y las tinas calientes son lo máximo

Fui al restaurante Comida muy mala, tragos malos. Poca carne menos de 50 gr el lomo salteado y recocido los dos igual de malos. Puré de zapatos parecía recién descongelado. Al pisco sour catedral peruano no me lo pude tomar. Mal mal

Tremenda experiencia ir al hotel en noviembre, poca gente, excelente atención tanto del personal del hotel como del restaurante. El restaurante muy rico todo y los cocktails de lujo. Las habitaciones increíbles con muy bonita vista. Las instalaciones lo mejor, piscinas y hot tub. Vimos las mejores puestas de sol. Muy buena ubicación del hotel. Celebramos increíble nuestro aniversario!!! Recomendadísimo! sin duda volveremos!!!!

Excelente estadía de tres dias ,en MAE hotel todo muy bien como siempre la amabilidad de su personal , la comodidad de sus habitaciones etc y la variedad y calidad de la gastronomía de su restaurante hace que siempre volvamos de nuevo junto a mi mujer . 👌

Hotel frente al mar, vale la pena pagar más por habitaciones frontales. La habitaciones tienen una pequeña terracita donde puedes sentarte a ver la puesta de sol. Cerca playa La Leche, lejos del Abanico y las tiendas (necesitas auto). Habitación un tanto pequeña y limpieza correcta. Cuenta con piscina exterior e interior climatizada no temperada. Al ir en Febrero, el agua sí estaba temperada app 27° C por el sol que pega en los vidrios del techo En invierno..no creo sea opción. Cuenta con tinajas al aire libre y vista al mar, sin costo para los huedpedes pero debes reservar hora. Ambas piscinas, las tinajas y el spa estan muy cerca, fácil para movilizarse. Reposeras dispinibles, no todas con colchoneta y algunas con colchonetas muy ajadas y sucias. En el sector piscinas, hay un bar, con una cantidad muy limitada de coktails y gaseosas. El bar funciona hasta Febrero. Nos quedamos hasta el 1 de Marzo y se cerró. Spa deficiente poca presencia de la chica. Muchas veces faltaban toallas y casi nunca habían batas. Las piscinas no tienen vista al mar. Sí las tinajas. Comida buena calidad como de restaurant de Stgo. La verdad extrañé y deberían considerar agregar las clásicas empanadas de queso con mariscos y pescado frito con ensalada chilena. Hay estacionamiento disponible para los huéspedes. En general bien. Pondría 4,5 pero como no se puede lo bajo a 4 por esas pequeñas cosillas.

Por el día del niño fuimos al Hotel Mae y fue una buenisima experiencia. Hicimos Yoga acuatico con los niños, incluyendo un bebé y la monitora un amor, pudimos participar sin problemas, incluso la ayudante me ayudó con la bebé para poder hacer los ejercicios. Las dependencias limpias y ordenas. Almorzamos en el Restaurante, cuya comida estaba riquisima (no saque foto porque me la comí antes, jaja), muchos platos recomendables, hace poco cambiaron de chef y solo decir que el servicio y la comida dan la nota alta. 100% recomendado los pescados y el pisco sour que sirven.

Fuimos a una Jornada de mi empresa donde éramos 15 pasajeros dos días, donde utilizamos salones de eventos, todos los servicios de alimentación y realmente fue una experiencia espectacular. El gerente y cada persona que trabaja en ese hotel realmente para destacar el nivel de atención y amabilidad. También cabe destacar lo cómodas, acogedoras e impecables habitaciones que nos asignaron. Tiene una piscina preciosa, otra temperada y tinas calientes.

Estuve una semana con mi prima en el hotel y si pides habitación con camas twin, ojo que son de una plaza. La habitación tenía una vista increíble, todo muy ordenado y limpio. El restaurante tiene un buffet abundante y productos sin gluten. El bar ofrece la misma comida del restaurante, me llamó la atención ya que regularmente en los bares de los hoteles hay opciones de sándwich o comida tipo snack. La piscina al aire libre y climatizada cumplen con lo esperado. Si quieres descansar ideal ir a la piscina al aire libre por la mañana!. Si vas al restaurante en fin de semana ideal reservar a la hora de almuerzo. Al lado del hotel hay un mini market donde puedes comprar snacks, agua etc. También hay un café que tiene una hermosa vista! Ideal para ver el atardecer!.

Si bien el hotel cumple con todo lo descrito en cuanto a servicios, encontré alta la tarifa en relación con hoteles de similares características, la pieza es pequeña, el baño para la categoría del hotel tenia detalles en la pintura, y en las cerámicas, pedí cambio de control remoto de la TV nunca se hizo. Buen desayuno, y buena comida.

Fuimos a conocer el restaurant del Hotel Mae en familia a la hora de almuerzo. El lugar es muy bonito, cómodo y tranquilo. La carta es exquisita, variedad sin abrumar, la construcción de la carta permite elegir desde lo sutil y liviano hasta lo potente que sorprende. Lo habitual en un restaurant de playa se vuelve perfectamente elaborado. La atención muy amable, pero, no me deja de sorprender la falta de preparación de los garzones, no manejaban la carta, me refiero, a que no tenían claridad de la preparación y composicion de los platos, menos sobre el maridaje de vinos, seria interesante una persona encargada de ello, asunto no menor en un país que elabora tan maravillosos vinos. Lentitud por falta de guía, en un restaurant como este, los garzones deben quedarse en sus plazas, deben procurar no tener mesas de extremo a extremo, eso permite el descuido y olvido de lo básico, como el pan y los líquidos. Esto no significa que la atención sea desatendida, pero sin duda provoca descuido por falta de tiempo, por tanto no está a la altura de la cocina. Sin duda es una experiencia para repetir. Nos veremos en 2024 si el universo nos acompaña. Mis respetos al Chef y su equipo.

Increíble hotel, cómodo y agradable y del personal nada que decir, un 7 todos. Vale la pena venir y disfrutar de este hotel que cuenta con todo a la mano, restaurant, bares y cafeterías. El hotel en si cuenta con todo, completamente equipado,

Hoy fui a comer con mi mujer y todo Perfecto salvo un detalle , al pedir Pastel de centolla lamentablemente venían con mucho cartílago de la centolla se lo comuniqué a él garzon don Wilfredo que realmente nos atendió muy bien , ojalá que se preocupen un poco más de esos detalles que no son menores .

Hice una reserva en diciembre por 10 noches para marzo y me llega un mail en enero que mi reserva fue cancelada, sin ninguna explicación. Llamé y me dijeron qué hay un evento el 9 de marzo y el hotel está lleno. Es una falta de respeto y seriedad. Jamás me había pasado con un hotel.