Pengguna Tetamu
11 Julai 2022
Este pequeño hospedaje se encuentra en un solitario y tranquilo callejón, céntrico pero apartado del bullicio de otras calles de la isla. Las habitaciones, decoradas al mejor estilo victoriano, son pequeñas (particularmente cuando viajas en números impares), pero muy limpias y con muy buen mantenimiento. La calefacción funciona de maravilla aunque hay pocos contactos de luz (es un edificio algo antiguo), cuenta con todos los servicios, una cafetera, bolsitas de té de cortesía y camas suficientemente cómodas. El baño es más pequeño aún, pero eso no limita su funcionalidad. Quizá lo único que no me agradó fueron los pequeños cobros (como el servicio de guarda maletas) que en otros hoteles no se cobran, sin embargo me parece pecata minuta. Los propietarios son amables, hablan poco español pero siempre dispuestos a ayudar a los turistas a visitar Venecia. Es un buen lugar si no cuentas con un presupuesto modesto.
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