Pengguna Tetamu
31 Januari 2023
NO había pasado tanta calor en mi vida. Echarse a dormir era un suplicio. Sin aire acondicionado. Sin nevera para poder beber agua fria. Sudando como pollos en una habitación pequeñísima a la que, cuando entré la primera vez me pareció una habitación de la serie Cuentame. Todo muy antíguo. Debido al calor teníamos que dormir con las ventanas abiertas, sin poder dormir ni por el calor ni por el ruido de gaviotas y de otros huéspedes, que de tener aire acondicionado podríamos haber tenido cerradas. Al final tuvimos que comprar un ventilador. Una recepcionista, jovencita con pelo rubio, una desvergonzada tratándonos de mentirosos porque la tarjeta no nos abría la puerta. Por sus narices que la llevaría con el móvil, cuando la llevé en todo momento en la cartera y en otro bolsillo. No me extraña que cobren a la entrada al hotel, porque si cobrasen a la salida, despues de la primera noche me hubiera ido. A todo esto unos precios exagerados. No pienso volver ni a este ni a ninguno de la misma cadena.
Terjemah