A la hora de hacer una reseña hay que ser justo, no vale expresar que todo es malo sin también ver los puntos buenos, que los tiene. La ubicación es muy buena, está muy cerca del centro pero a su vez en una calle tranquila. Tienes un montón de servicios a un minuto y una zona de parque con el río al lado. También la comunicación y atención ANTES de llegar a la perfección, te explican todo loque necesitas saber. La zona común está súper equipada con todo lo que necesitas, incluso estantes para la comida, además tienes café e infusiones gratuitas para ti, como mapas de la ciudad a tu disposición y que muy amablemente te ofrecen. Lo que ocurre es que es un hostel de novatos para novatos. Por muy hostel que seas, no puedes dar una retahíla de prohibiciones al llegar ya que lo que das a entender es que te están controlando y eso, indefectiblemente, atrae a personas que generan descontrol. Los que somos personas que sabemos comportarnos nos genera un rechazo brutal que la bienvenida sea así. Pero más allá de consideraciones personales vamos al asunto en cuestión: todo lo que era buena comunicación antes de llegar desaparece una vez estás allí. En mi habitación, la Sol, de 4 plazas, durante 3 días hacía tal frío que se condensaba el agua debajo de la ventana y una de las camas. La dueña y otra persona aseguraban que cada 30 minutos funcionaba la calefacción, como el primer día pasé frío lo estuve comprobando por mí mismo a ver si era verdad y en mi habitación no era así. Esto se ve fácil por el tubo de agua de calefacción que estaba frío como el hielo. Sabemos que si por ahí pasa el agua queda, al menos, templado, que no era el caso. Así a la mañana del segundo día bajé a hablar con la chica de recepción para decirle que por favor si podía echar un vistazo a ver que pasaba y secar un charco de agua que había empapado mi mochila por la condensación. ”Si, si, yo luego subo” y una sonrisa. Todavía la estoy esperando. El charco y mi mochila mojada también. El tercer día, más de lo mismo, frío, la habitación súper húmeda y el suelo del cuarto mojado. Misteriosamente, al 4 día de estancia la calefacción si funcionó, el radiador estaba caliente, y al levantarme ni una gota de agua en la habitación. Too late diría yo. Lo peor que puedes hacer es no escuchar al cliente. Y menos cuando le has hecho cumplir tus normas absurdas como que al irte dejes las sábanas en una bolsa. He viajado por medio mundo en muchísimos hostels, he trabajado en esto y nunca vi algo igual. Como tampoco que te manden un mensaje y te digan cómo debes de ducharte haciendo referencia a algo que no tenía nada que ver contigo, pero que como estabas en la habitación pues asumes que es así. Supongo que a los ingleses no se los mandan, pero bueno. Total, 90€ pagados de estancia de 5 días, de los que me quedé 4, tres de ellos pasando un frío tremendo, en el enero de Granada con las noches a -3/-4 grados y sin calefacción. Un lujo. Y además, como remate, las literas son las típicas de
Bagus
12 Ulasan