Escogimos el hotel debido a su cercanía al Wizink Center (a un paseo de unos 15 minutos). También porque mis amigos iban en coche y necesitaban su parking. La estación de metro de Diego de León está al lado mismo, en la calle de Juan Bravo. Sin embargo, el hotel está en una calle menos principal y bastante tranquila. Cerca del hotel había muchos restaurantes y diversas cadenas de comida rápida. También un supermercado Aldi, que nos vino muy bien. Compartimos 3 amigas una triple y la habitación estuvo muy bien, con camas muy cómodas. Quizás la única pega fue que los edredones daban bastante calor, porque hizo muy buen día. Junto a las mesitas de noche había enchufes (tan necesarios) y una lámpara para leer. El cuarto tenía una silla y escritorio, con hervidor, te, café y tazas. También había una nevera y una caja fuerte en el armario. Había un televisor, pero no lo utilizamos. La wi-fi funcionaba bien. El cuarto de baño tenía dos toallas por persona, muy buena ducha, geles y champú. También cepillos de dientes, peines y loción para el cuerpo. Genial, además, el espejo de aumento. El secador iba un poco lento y no calentaba mucho, pero cumplía su cometido. Comimos en el restaurante al llegar. El menú tiene muy buen precio, alrededor de los 14 euros. La berenjena frita de primero estaba realmente rica. El segundo, pollo a la cerveza, no me gustó tanto, pero estaba bien. Incluía postre, que fue tarta de queso. Muy buen servicio y nos atendieron muy bien pese a llegar un poco tarde, en mi caso. Al día siguiente preguntamos si podíamos hacer un desayuno continental y nos dejaron hacerlo por unos 4 euros. Ya nos advirtieron que así solo podíamos coger café con leche o similares y tostadas o bollería, pero no del resto. Creo que podría haber cogido zumo, pero no lo hice por si acaso. Esta fue una solución un poco improvisada por parte del hotel y hubiera estado bien que dieran las dos opciones y que estuviera más claro el precio y lo que incluye desde el inicio. El buffet tenía muy buen aspecto, pero no todo el mundo necesita tanta comida por la mañana. En general, muy buen hotel con muy buen servicio y trabajadores muy amables. Tomo nota de él para futuras visitas y conciertos en el Wizink Center.
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